Mostar. Del 17 al 20 de febrero de 1999 se reunieron en Mostar Fr. Stephan Ottenbreit, Vicario general de la Orden, y Mons. Ratko Peric, Obispo Diocesano, para llevar a cabo la ejecución definitiva del Decreto de la Santa Sede Romanis Pontificibus. Estuvo presente, en nombre de la Santa Sede, Mons. Mario R. Cassari, Encargado de Asuntos ad interim de la Nunciatura Apostólica en Bosnia-Herzegovina. El Definitorio general de la Orden y la Provincia Franciscana de Herzegovina, en comunión con el Obispo local, subrayaron su deseo de pleno acuerdo y de unidad de objetivos. Las 7 parroquias indicadas en el Decreto han sido entregadas al Obispo Los párrocos franciscanos han quedado exonerados, a partir del 22 de febrero, de su compromiso pastoral y han recibido el encargo de atender otras tareas en la Provincia. Fr. Stephan y los Definidores generales Fr. Kapistran Martzall y Fr. Peter Schorr concelebraron con el Obispo la Eucaristía dominical en la catedral de Mostar, abarrotada de fieles y con la presencia de los medios de comunicación de Bosnia-Herzegovina y de Croacia. El paso de las 7 parroquias al Clero diocesano no pudo realizarse el día 21, domingo, como estaba previsto, porque feligreses llevaron a cabo actos de resistencia física organizada, profirieron graves amenazas escritas y orales, ocuparon iglesias y casas parroquiales y sustrajeron registros y sellos parroquiales. Mons. Ratko Peric expresó públicamente su gratitud profunda -y la del presbiterio y los fieles- a la Orden y a la Provincia de Herzegovina por su incesante labor al servicio de la Iglesia local y reafirmó la necesidad de su presencia y de su colaboración pastoral en el futuro. Tras la ejecución del Decreto Romanis Pontificibus, la Provincia de los Hermanos Menores de la Asunción de la B. V. M. de Mostar tiene la responsabilidad pastoral de 30 parroquias, y la Diócesis, de 52.

COMUNICADO

Tras la Carta conjunta, de fecha 16 de noviembre de 1998, de Fr. Giacomo Bini, Ministro General de la Orden de Frailes Menores, y de Mons. Ratko Peric, Obispo de la Diócesis de Mostar-Duvno, y tras el Comunicado, emitido conjuntamente por Mons. Marcello Zago, Arzobispo, Secretario de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, por el mismo Ministro General y por el Obispo local, el día 14 de diciembre de 1998, Fr. Stephan Ottenbreit, Vicario General de la Orden, Representante del Ministro General, y Mons. Ratko Peric, Obispo Diocesano se reunieron en Mostar, del 17 al 20 de febrero de 1999, para llevar a cabo la ejecución definitiva del Decreto de la Santa Sede Romanis Pontificibus. Estuvo presente, en nombre de la Santa Sede, Mons. Mario R. Cassari, Encargado de Asuntos ad interim de la Nunciatura Apostólica en Bosnia-Herzegovina. Los dos Coejecutores han constatado y decidido cuanto sigue: El Gobierno General de la Orden, con la Provincia Franciscana de Herzegovina, en comunión eclesial con el Obispo local, subraya querer ejecutar, en pleno acuerdo y unidad de objetivos, cuanto decretó la Santa Sede y decidió el Capítulo General de la Orden Franciscana. Es doloroso comprobar que la fecha del 21 de febrero de 1999, previamente fijada para que las parroquias mencionadas en el Decreto pasaran de los Franciscanos al Clero Diocesano, no haya podido tenerse en consideración, no obstante la buena voluntad de los Coejecutores, por los siguientes motivos: se han verificado hechos de resistencia física organizada, graves amenazas escritas y orales, ocupaciones de iglesias y de casas parroquiales, extorsión de registros y de sellos parroquiales... A partir del 22 del presente mes de febrero, los actuales párrocos y responsables pastorales de las parroquias citadas en el Decreto quedan exonerados de su compromiso pastoral. Dichos párrocos y responsables son: Fr. Petar Vlasic de Blagaj/Buna, Fr. Leonard Hrkac de Crnac, Fr. Marko Dragicevic y Fr. Miro Sego de Grude, Fr. Alojzije Bosnjak de Jablanica, Fr. Tihomir Kutle de Mostarski Gradac, Fr. Oton Bilic de Nevesinje, Fr. Drago Skrobo de Ploce-Tepcici. Estos Hermanos, que han sido destinados por su Ministro provincial, con su Definitorio, a diversas Casas de la Provincia, tendrán encargos pastorales en la Diócesis conforme a las soluciones que tome el Gobierno Provincial de acuerdo con el Obispo diocesano. En espera de que la situación se normalice cuanto antes, es decir, en espera de que los Sacerdotes diocesanos puedan tomar la administración canónica de las parroquias citadas, el Obispo de la Diócesis se compromete, como es su deber, a garantizar la atención pastoral de los fieles. Se ruega a éstos que se dirijan: los Feligreses de Blagaj/Buna y de Nevesinje, a las Oficinas parroquiales de San Juan Apóstol o de la catedral de Mostar; los Feligreses de Crnac y de Mostarski Gradac, a las Oficinas parroquiales de Polog o de Jare; los Feligreses de Grude, a las Oficinas parroquiales de Ledinac o de Raskrizije; los Feligreses de Jablanica, a las Oficinas parroquiales de San Mateo Apóstol o de la catedral de Mostar. El Obispo y los Sacerdotes de la Curia diocesana ofrecen también su disponibilidad a los fieles que necesitaran de ellos en el ámbito pastoral. En cuanto a la situación actual de Capljina, los Coejecutores del Decreto recuerdan, sobre todo a los Fieles, que los sacerdotes Bonifacije Barbaric y Boze Rados fueron expulsados de la Orden de Frailes Menores el día 28 de febrero de 1998 y que esta expulsión fue confirmada por la Santa Sede el 23 de marzo de 1998. Por consiguiente, no pueden vestir el hábito franciscano. Suspendidos «a divinis» por la Santa Sede el 17 de diciembre de 1998, con la aplicación de la suspensión por el Obispo diocesano en fecha 30 de diciembre de 1998, les está prohibido celebrar cualquier sacramento. En cuanto a Fr. Mile Vlalic, el tercer sacerdote desobediente y residente en Capljina, está actualmente en curso su expulsión de la Orden. Los sacramentos de la Confesión y del Matrimonio administrados por estas tres personas son inválidos. Se aplicarán sanciones canónicas similares a los franciscanos que no se atengan a las directrices de la Santa Sede y del Ministro general con su Definitorio. En casos de extrema necesidad, las leyes eclesiásticas permiten al Obispo local declarar en entredicho las iglesias ilegítimamente ocupadas. El Gobierno General de la Orden, junto con el Gobierno de la Provincia Franciscana de Herzegovina, renueva públicamente su divergencia de la «Asociación de fieles católicos Mir i Dobro». Esta asociación carece del reconocimiento de la Iglesia Católica y es, por tanto, ilegítima. En este momento de prueba, los fieles católicos de la Diócesis de Mostar-Duvno, coherentes con su pasado, quieren reforzar su sentido de comunión y de fidelidad a la Sede Apostólica y al Santo Padre. El Obispo local, con el presbiterio y los fieles, profundamente agradecido a la Orden de Hermanos Menores y a la Provincia Franciscana de Herzegovina por su incesante tarea al servicio del crecimiento y de la unidad de la Iglesia local, reafirma la necesidad de su presencia y de su colaboración pastoral en el futuro. Por intercesión de María santísima, Madre de la Iglesia, este tiempo de cuaresma, propicio para la conversión, y todo este año, dedicado al Padre celestial, nos ayuden espiritualmente en nuestro camino, a través de la cruz, hacia la resurrección. Mostar, 20 de febrero de 1999. Fr. Stephan Ottenbreit, Mons. Ratko Peric Vicario General de la Orden de Frailes Menores Obispo de Mostar-Duvno